Por fín encontré un sitio en Reikiavik en el que sirven Hákarl. Hákarl significa "tiburón podrido", literalmente. Consiste en matar un tiburón, enterrarlo, dejar que se pudra 6 meses y luego servirlo en taquitos pinchados en un palillo. Se suele servir con un aguardiente típico denominado Brennivín. Por qué? Porque se supone que es tradición aquí. E incluso hacen un festival anual en el que todo el mundo lo come. Hay mucho debate cultural sobre si es un reclamo turistico para la gente que viene de fuera y en realidad no se lo comen, o si de verdad los islandeses lo consumen. Pues bien, una vez aquí he comprobado que, aunque no todo el mundo lo come, sí que muchos islandeses lo consumen regularmente.
Aquí véis al chef Ramsey y a James, de Top Gear, echando un concurso mano a mano a ver quién se lo come:
Y aquí el enlace de la Wiki:
http://es.wikipedia.org/wiki/H%C3%A1karl
En fín, sé que es una cerdada, pero, ya que estoy aquí...
En fín, esta cosa huele desde la cocina del garito... Cuando me lo traen a la mesa el tufo inunda todo alrededor. No exagero, buscadlo en Google. Huele a amoniaco y a carne podrida. No como cuando se estropea algo en la nevera, no. Huele como cuando se ha muerto un bicho hace mucho tiempo. Joder, es realmente asqueroso y huele muy fuerte. Llegados a este punto, tengo tres opciones: No comérmelo, que no pasa nada, comérmemlo y vomitarlo (que, según la camarera, es lo que hace la mayoría de la gente), o comérmelo, tomarme luego el licor ése para aguantar el sabor, y joderme el estómago toda la noche.
Se admiten apuestas...
A la una...
A las dos...
A las tres!!
Y Katrín desapareció para no volver jamás. Nunca. En la vida. Y no la culpo.
ResponderEliminarJajajajaja... Sólo diré una cosa: Cuenta los palillos... ;-)
EliminarVaya puta mierda
ResponderEliminar